En sus comienzos se trataba de una hermandad sindical de labradores y ganaderos, sobre los años 40 aproximadamente. Gestionaban los pastos y rastrojeras, contaban con guardas para el campo.
En los 70 pasó a llamarse Cámara Agropecuaria Local, que continuaba con la gestión de los pastos y rastrojeras y era la encargada de hacer, cobrar y pagar la seguridad social de los trabajadores del campo. Estaba formada por presidente, secretario y corporación de la Cámara, como cualquier otra asociación.
A principios del 2000, se extinguen las Cámaras y el patrimonio pasó a la Cámara Provincial, la cual se lo devuelve a los agricultores, fundándose así la Junta Agropecuaria Local, formada por 22 miembros entre agricultores y ganaderos, que, aparte de gestionar pastos y rastrojeras, gestiona el coto de caza y a medias con el ayuntamiento, los asuntos de interés comunes para agricultores y ganaderos, aportando así al municipio un equilibrio medioambiental.